UN
FUTURO PREDECIBLE
Había una vez en
una ciudad grande donde la gente vivía de prisa, un joven comunicólogo al cual
no le iba muy bien. Su madre le decía que presentía que algo grande y bueno
para él, para su futuro.
Tenía una novia muy guapa, ella lo amaba mucho e igual en
una ocasión le dijo –sabes amor, soñé que ganaba un premio pero antes de
terminar mi sueño desperté. A este joven
le parecía algo extraño que ya dos personas le hablaran sobre algo grande para
él. Era muy extraño y se paso dos tardes
pensando que pudiera ser, el clima ayudaba para reflexionar y pensar. Eran de
eso días nublados, un poco lluviosos. De esos que hacen que no den ganas de salir,
es mejor estar en casa, pensar, etc.
Cierta mañana, cuando se dirigía a su trabajo, alrededor
de las 6:05 am. Caminaba aprisa ya que
se le había echo un poco tarde, se encontró con una señora que vendía boletos
de lotería, esta lo invito a comprar uno diciéndole –seguro, que
usted ganara joven. Sino de mi se acuerda.
Se convenció y lo compro aun dudando de poder ser el
ganador. Al llegar a casa le cono a su mama
lo que ocurrió y como ocurrieron las cosas. El sorteo seria en tres
días, por supuesto que también le conto a su novia la anécdota anterior y ella al igual que su madre coincidían en que
ganaría el, al igual que la señora que se lo vendió.
Se llego el día del sorteo, si era verdad así como las tres mujeres lo decían y
aseguraban, el joven fue quien resulto ganador de dicho premio. Este se sorprendió
de lo que ocurría y por la certeza de ellas tres con respecto a que el
ganaría.
FIN.
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