jueves, 5 de diciembre de 2013

CUENTO- LA YERBA DE ANGEL Y MARIA-JUANA



LA YERBA DE ANGEL Y MARIA JUANA
En un alejado pueblo cerca del año 1992, había una mujer llamada María, María vivía junto a su esposo Ángel, era una familia un poco problemática ya que con la mayoría de sus vecinos tenía un cierto tipo de rencillas debido a que los dos eran cultivadores  de una yerba con un olor característico ala que ellos llamaban Juana, algunos de los pobladores consumían dicha yerba para sanar sus dolores físicos, ya que se decía que era medicinal, algunos otros solo la utilizaban para relajarse después de una larga jornada laboral en el campo, pero un día el hijo de un gendarme de aquel pueblo decidió fumar la dichosa yerba de María y Ángel.
Giovanny el hijo del gendarme quedo asombrado por los efectos de Juana, ya que el comenzó a sentirse en un completo estado de relajación, a lo cual cual los consumidores de Juana llamaban la etapa del avión. Giovanny se sentía maravillosamente bien ya que pasada la hora después de haber fumado a Juana comenzó a sentir mucha risa seguida de un fuerte apetito.
María nunca había pensado que al consumir la milagrosa yerba se podían volver adictos a sus efectos, o en algunas veces dependientes de Juana. La mayoría de los pueblerinos de aquel pueblito estaban hartos de todos los problemas que ocurrían debido a Juana, y decidieron poner una solución práctica e ir a hablar con los campesinos cultivadores de Juana.
Ángel y María eran un poco temerosos y muy precavidos, motivo por el cual en el sótano de su granja, guardaban un arsenal de artillería de épocas de la segunda guerra mundial. Al notar la llegada de los pueblerinos Ángel el cultivador corrió al sótano por su preciosa arma. María que era una mujer recatada y muy sentimental ayudo a su esposo Ángel colocando una serie de candados y cadenas sobre la puerta de su granja para evitar que alguno de los pobladores entrara y armara algún tipo de revuelta.
Al cabo de unos días Giovanny el hijo del gendarme fue a que María le proporcionara un poco más de su yerba, María le comento que no podía hacer tal cosa ya horas antes los pueblerinos intentaron deshacerse de su preciada yerba y el principal alborotador o el organizador de dicha revuelta había sido su padre el gendarme Jaime.  Giovanny no podía creer las palabras de María ya que él sabía que Jaime y Ángel habían sido amigos durante mucho tiempo y vivieron la mayor parte de su vida peleando en la segunda guerra mundial, y ambos eran pertenecientes a un grupo o armada de elite llamada los halcones negros.
Camino a casa Giovanny seguía preguntándose el por qué su padre había intentado detener la cultivación de Juana ya que el mismo era uno de los tantos consumidores de Juana. Era tanta su preocupación y que decidió regresar a la granja de Ángel y María para intentar hablar con Ángel y entender un poco la situación.
Después de unos minutos Ángel y Giovanny empezaron a discutir el porqué de Jaime el padre de Giovanny se había comportado de esa manera, hasta llegar al punto en donde Ángel le confiesa que Jaime estaba un poco loco y vivía traumatizado por alguna serie de cosas por las cuales había pasado durante su estancia en el ejército.
Ángel solo se burlaba del joven Giovanny, el comenzó a creer que el cultivador era el que estaba loco y no su padre. El solo podía recordar una historia que su padre le había contado de cuando había estado en la guerra y de hecho esa historia si lo dejo asombrado y cada que la recordaba se le ponía la piel de gallina. Dicha historia era del como su padre había perdido a todo su batallón durante una emboscada que sufrieron y el suponía que ese era el motivo por el cual su padre no estaba bien de sus facultades, y motivo por el cual él fue dado de baja del ejército.
Pasaron semanas sin que volviera a pasar nada en aquel pueblito hasta que un día la esposa de Ángel, María fue a comprar unas cosas que le hacían falta para su nuevo cultivo. María comenzó a sentirse un poco inseguro y desprotegida ya que todas las personas del pueblo la veían con ojos de odio y desprecio. Al caminar unas cuadras más noto que alguien la venia siguiendo pero no le dio mucha importancia ya que iba decidida a realizar sus compras y no detenerse para llegar temprano a su hogar y atender a su esposo Ángel. Pero cuál fue su sorpresa al entrar en una de las calles menos habitadas del pueblo, era Jaime el gendarme quien la venia acechando cual pervertido o enfurecida persona, Jaime con una serie de puñetazos logro tirar a María seguida de una serie de insultos muy fuertes.
María corrió hacia su casa para contarle a su esposo lo que le había ocurrido minutos antes cuando regresaba de comprar el material fertilizante para Juana. Ángel se notó molesto con lo que había ocurrido, y al llegar la noche Ángel salió de su casa y decidió ir a la cantina del pueblo donde la mayoría de los clientes eran personas que consumían a Juana. Al entrar a la cantina noto que la mayoría de los clientes se encontraban jugando baraja  y algunos otros solamente estaban disfrutando de un gran tarro de cerveza de barril. Era de madrugada y  la pequeña cantina se iba quedando sola poco a poco, Ángel que ya se encontraba un poco ebrio comenzó a contarle al cantinero una de sus historias de cuando había estado en el ejército y del cómo comenzó o como se decidió a cultivar a Juana. Los pocos borrachos que se encontraban en la cantina estaban muy atentos a la historia de Ángel cuando de pronto se escuchó el relinchar de un caballo, la noche era obscura, de pronto solo alcanzaron a observar una silueta que se acercaba a la entrada de la cantina, algunos de los pobladores sintieron un poco de miedo ya que decían que por las noches el gendarme Jaime salía a recordar el cómo había perdido a su batallón y se ponía como loco lanzando balas a diestra y siniestra.
Cada vez se sentía más cerca la presencia de aquella silueta, de pronto se comenzaron a abrir las puertas de aquella cantina  motivo por el cual todos comenzaron a temblar de miedo, y cuál fue su sorpresa era María quien andaba buscando a su esposo Ángel porque estaba preocupada por él,  María se llevó Ángel casi cargado ya que se encontraba totalmente ebrio y perdido en alcohol. Al llegar a su humilde granja María le comento a Ángel que algo estaba pasando con su cultivo, que este comenzaba a ponerse cada vez más verde y soltaba un olor más fuerte al que tenía. Ángel que aún se encontraba bajo los efectos del alcohol le confeso que era algo que debía de pasar y le dijo que no tuviera miedo. Eran alrededor de las 4 de la mañana cuando comenzó a escuchar unas fuertes risas de dos personas de sexo masculino sin dudar María tomo su rifle y bajo pare ver que era lo que ocurría, lo único que alcanzo a notar y la dejo sorprendida fue a su esposo Ángel y al gendarme Jaime. Ellos estaban teniendo una plática muy divertida y sarcástica a su parecer.
Sorprendida de tal hallazgo ya que ellos se suponían eran enemigos, se quedó inmóvil mientras los dos hombres la observaban, el gendarme se paró rápidamente de su asiento para tomarla por el cuello mientras que Ángel la apuñalaba más de 3 veces en la espalda. María quedo agonizando cerca de las escaleras de su habitación los dos compadres los cuales todos pensaban que eran enemigos tenían planeado que pasara eso desde que estuvieron en la guerra, ellos decidieron enterrar el cuerpo de María justamente en donde tenían el cultivo de Juana.
Lo único de lo que no se percataron fue que María aún estaba viva, y María salió de la tumba que los compadres habían hecho para vengar su supuesta muerte. María fue en busca de Giovanny para poder completar su venganza, ella interrumpió en la casa del joven Giovanny con pasos muy sigilosos llego a la habitación de Giovanny, cuando estaba dispuesta a darle un balazo en la frente, Giovanny despertó, el despertó de una grande pesadilla, y con el corazón latiéndole muy rápido abrió sus ojos y se dio cuenta que seguía en los cultivos de Ángel y María y noto que se había quedado dormido cerca de Juana, María fue la que lo despertó y le dijo que por que se había dormido que si había fumado Juana, le explico que esos eran algunos de los síntomas o efectos de la famosa Juana y que lo que le había ocurrido a él solo había sido un pason de yerba…
FIn

OMAR ULISES GARCIA MUÑOZ

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